El Burgo de Osma

Real Hospicio - Residencia San José

Real Hospicio - Residencia San José

siglo XVIII El arquitecto encargado de construir el Hospicio fue Luis Bernasconi. El Hospicio se comenzó en 1785 y en 1790 estaba concluido y ya falto de…
siglo XVIII El arquitecto encargado de construir el Hospicio fue Luis Bernasconi. El Hospicio se comenzó en 1785 y en 1790 estaba concluido y ya falto de recursos, por lo que en 1793 se llevaron los internos a Zaragoza y el edificio fue ocupado por la Real Compañía de Ganaderos de Soria y Burgos que construyó, adosada al Hospicio, una fábrica de manufacturas de lana, con lavadero, batán y tinte. La Compañía ocupó el inmueble hasta 1803. Tras la incautación por parte de Hacienda, el Hospicio pasó a pertenecer a la Diputación de Soria, que todavía hoy es su propietaria. En tiempos del obispo Horcos (1853-1861) monjas de San Vicente de Paúl tomaron la responsabilidad de la atención a los huérfanos y expósitos. Hoy sigue siendo utilizado para fines benéficos con el nombre de Residencia San José. El Real Hospicio es un voluminoso edificio, de enorme sencillez y de planta cuadrilonga. Tiene 84,8 M. de fachada por 46,4 de fondo. En su interior se pueden contemplar dos patios, de indudable semejanza con el central del Seminario. Su fábrica es de mampostería con las esquinas y bordes de los vanos de sillería, como la portada. Lo más interesante del Hospicio es la portada principal con el balcón superior. La puerta de ingreso es un arco rebajadísimo por encima del que se dispone el balcón del piso principal que proporciona a la composición una elegante vistosidad, muy sabatinesca: la puerta que da salida al balcón se abre en un nicho. Coronado el vano, dento del propio nicho, figura un llamativo escudo pétreo de Carlos III.