Ayllón

Torre de La Martina

Torre de La Martina

En lo alto del cerro del Castillo, coronando la villa, encontramos La Martina, cuya resistencia ante el paso del tiempo la han consagrado como la imagen…
En lo alto del cerro del Castillo, coronando la villa, encontramos La Martina, cuya resistencia ante el paso del tiempo la han consagrado como la imagen más emblemática de Ayllón. Esta torre albarrana de planta pentagonal fue construida a lo largo del siglo VIII durante la ocupación árabe de la península, a la par que el resto de la muralla y otras torres similares que conformaban la fortificación en el cerro. De todo el conjunto solo quedan como restos esta torre vigía y a pocos metros parte de la muralla conocida como "Los Paredones". En referencia a su función inicial como torre defensiva se pueden apreciar un par de huecos simétricos en una de las caras de la bóveda de paso, relevando un sistema de maderas para cerrar el acceso. También apreciamos en lo alto de la misma bóveda, sobre el paso, dos perforaciones que harían las veces de buheras de defensa (defensas verticales que permitían lanzar proyectiles desde un plano superior). Tras la reconquista cristiana se construyó en el cerro la iglesia de San Martín en algún momento entre 1353 y 1587, nutriéndose esta de la antigua torre árabe para utilizarla como campanario, agregándole una espadaña. De aquí nace el peculiar nombre de ‘La Martina’, el cual sabemos que se usa al menos desde el siglo XVIII, gracias a los escritos del párroco Manuel Carrascal sobre la torre. En 1795 se suprimió la parroquia de San Martín, abandonada y poco a poco destruída por el paso del tiempo. La Martina quedó como campanario y, durante décadas, marcó de abril a septiembre el alba y el mediodía a los labradores que trabajaban en el campo.